martes, 22 de febrero de 2011

Los hombres de uniforme con los que fantaseamos
























Los hombres de uniforme con los que fantaseamos


¿Con qué clase hombre fantaseamos? La industria del porno siempre se ha inspirado en aquellas personas a las que les gustan los hombres que usan uniforme, ¿pero cuales son los que realmente nos gustan a nosotros?

Hemos elegido a algunos de los hombres uniformados con los que los gays habitualmente fantaseamos, con el objetivo de analizar las razones de su atractivo.

Bombero

La fantasía del bombero es perfecta para aquellos chicos que quieren ser levantados en brazos y bajados por la escalera, antes de que su fuego sea extinguido. Además, deslizarse por el caño del bombero mientras te rocía con su larga manguera ha sido un pasatiempo popular durante mucho tiempo.


Policía

Si te atraen los agentes de la ley, eso significa que te excita la sumisión total. Si crees que el sexo gay es algo sucio, puede que tengas tendencia a sentirte que eres un chico que se ha portado mal. Con el objetivo de reformarte, buscas a alguien que te espose, que te zamarree y que te amenace con su pistola. Es entonces cuando eso de "sentir el largo brazo de la ley” cobra un significado completamente diferente.


Trabajadores manuales

Si te gustan los traseros de los constructores, entonces lo industrial es tu fantasía. Probablemente te agrade la compañía de varios y sudorosos carpinteros, todos ellos con sus pantalones cargados de herramientas. Seguramente has tenido muchas fantasías con un plomero cachondo que aparezca en tu casa y se pase un buen rato manoseando tus cañerías chorreantes.


Ejecutivo

Si un hombre de traje hace que tu ropa interior se vuelva pegajosa, es obvio que los ejecutivos son lo tuyo. Un fino traje con corbata es el primer paso hacia una fantasía respecto a una figura de autoridad. Sin lugar a dudas, te imaginas a ti mismo recibiendo órdenes, incluso aunque esto signifique que puedas terminar con tus calzones en los tobillos, inclinado sobre un escritorio.


Rugbiers

Si un grupo de muchachos llenos de barro con remeras y shorts ajustados te suben la temperatura, entonces es lógico que lo que te gusta es jugar “rudo y sucio”. Seguramente, tus días de escuela estuvieron llenos de fantasías acerca de ser perseguido por una horda de sudorosos jugadores de rugby, todos ellos buscando agarrarse de tu protector genital. No hay que ser un genio para adivinar que la historia termina en los vestuarios, con mucho enjabonado de entrepierna y jugueteo con las toallas.


Mecánico

Las fantasías con mecánicos representan un sexo sucio con uno de esos tipos desalineadamente sexies que son capaces de reparar cualquier cosa. Estamos hablando de herramientas engrasadas y mucha acción con la llave inglesa, para ajustar lo que sea que esté suelto y flojo.


Surfista

La fantasía del surfista viene con el agregado de un cuerpo bronceado y un sabor levemente salado. Es la típica fantasía de adoración al ídolo muy parecida a la del héroe del equipo de fútbol del secundario. Sin embargo, el elemento acuático de la fantasía del surfista no debe ser dejada de lado. Si nos van a embadurnar el rostro con una loción para protegernos del sol, debemos asegurarnos de tomarnos el tiempo de invertir en un buen par de antiparras.


Soldado

Si los soldados son los que ocupan tus fantasías, entonces definitivamente te gusta la idea del combate cuerpo a cuerpo. Te encanta arrastrarte en cuatro patas con un escuadrón completo persiguiendo tu trasero. Eres de los que le importa el tamaño, cuanto más grande y más cargada esté el arma, mejor.


Marinero

¿Te seduce la idea de estar atrapado en un barco en alta mar con un montón de marineros atractivos y calientes? Esta clase de fantasía tiene un toque de un glamour de antaño debido a esos clásicos uniformes impecables y los graciosos pantaloncitos.


Doctor

Las fantasías con los doctores es una de las más perversas que existen. Si te excita la idea de alguien que te pida que tosas y escupas, definitivamente eres un perverso sexual. No caben dudas de que ves al sexo como algo sucio y la única forma de que te excites es si alguien te pide que te desvistas para revisarte con un guante de goma.

Articulo Cortesia:

Buenos Aires – (SentidoG.com)

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